Allá por abril de 2016 publiqué un extenso artículo titulado «Mis clientes me piden «oro ecológico», ¿qué puedo hacer?», cuya lectura te recomiendo. Soy José Francisco Alfaya, impulsor de 925lab, y tal vez haya llegado el momento de volver a reflexionar sobre esta cuestión. Si este tema te interesa, te invito a que sigas leyendo.

¿La concienciación por la sostenibilidad se abre paso en el sector joyero?

A rebufo de los avances en otras industrias y siguiendo la dinámica de la industria joyera internacional, el sector joyero en España ha alcanzado algunos hitos significativos a lo largo de los últimos años. Algunos de ellos, individuales; otros, colectivos. El Colegio Oficial de Joyeros, Orfebres, Relojeros y Gemólogos de Cataluña (JORGC) ha puesto en marcha un grupo de trabajo especializado en sostenibilidad, integrado por Rosa Tous (TOUS), Roc Majoral (MAJORAL) y Marc López (D’OR JOIERS), que ha acometido actuaciones de distinta naturaleza a partir de una recogida de datos realizada en 2021, que se actualizará este mismo año. Algunas de estas iniciativas son la redacción de su «Manifiesto de Sostenibilidad» , la creación de un directorio específico para proveedores con valores éticos y/o medioambientales o una guía breve para tratar de orientar a los profesionales del sector en sus primeros pasos en este contexto. Pienso que el JORGC merece una felicitación por esto y confío en que en el futuro se convierta en un caso de éxito.

Joan Ignasi Moreu, gerente del JORGC, ha contactado conmigo recientemente para consultarme si sería posible referenciar el artículo «Mis clientes me piden «oro ecológico», ¿qué puedo hacer?» en una nueva sección de su web que será un repositorio de artículos relacionados con la sostenibilidad en la industria de la joyería. Como no podría ser de otra forma, me he sentido halagado y he dado mi autorización… después de todo, a todos nos gusta que se valore nuestro trabajo.

Por una parte, y como hago siempre, realicé un esfuerzo no menor a la hora de documentarme para escribir con rigor; por otra parte, ¿no es llamativo que 8 años más tarde no haya publicaciones más recientes sobre un asunto que parece, a priori, relevante para nuestro sector? Es precisamente esta pregunta la que me ha animado a redactar estas líneas.

¿Se han producido avances en los últimos 8 años?

Creo que la primera pregunta a responder es ¿por qué no he publicado una actualización de ese artículo? ¿No debería resultar de interés para la audiencia de 925lab, sabiendo que está formada por profesionales de la industria joyera? Y, con toda sinceridad, la respuesta a esta pregunta es un tanto desapacible.

Por una parte, porque mi sensación es que la sostenibilidad está lejos de convertirse en una prioridad para el sector joyero. Ojo, me encantaría estar equivocado, pero esta es mi sensación personal y si me he animado a publicar este artículo que estás leyendo es porque me interesa recabar retroalimentación sobre esto.

Por otra parte, porque los avances en relación a la cuestión del «oro ecológico» no parecen muy alentadores. Comparto algunos datos a continuación para que todos podamos hablar con propiedad:

• Explicaba en mi artículo que la producción de oro «ético» es testimonial. Tomemos como referencia el oro con certificación Fairmined, por ejemplo… representa un 1% de la producción mundial de oro («Ethical gold: Fairmined VS. recycled gold a fair comparison»). De hecho, De hecho, Desde 2014 se han vendido 1,7 toneladas de oro Fairmined [«Primeras comunidades mineras del Amazonas obtienen certificación Fairmined, abriendo el camino a la primera cadena de suministro de oro certificado en la región»], cuando cada año se extraen unas 3100 toneladas de oro [«¿Es sostenible el oro?»]. La conclusión natural es que sigue resultando complicado tener acceso a esta materia prima, ¿verdad?
• Lo anterior sería menos preocupante si tuviese visos de cambiar a corto o medio plazo. Sin embargo, no tiene mucha pinta de eso… incrementar el volumen de oro de origen ético disponible en el mercado no es nada sencillo («En busca de oro ético»).
• El influjo del crimen organizado sigue siendo uno de los principales escollos para lograr cambios significativos. No sólo es que esto no haya mejorado, es que en muchas zonas del planeta se ha agravado (por ejemplo, «The devastating impact of illegal gold mining in Latin America» según la Interpol, «Gold Mining in Colombia Increasingly Tied to Organized Crime: Report « en Insight Crime o «50% de oro exportado por Bolivia viene de la minería ilegal de Perú» en El Diario).
• Añado un último punto, por no extenderme demasiado. Es necesario responder una pregunta clave: ¿hasta qué punto está el mercado dispuesto a pagar un plus por el oro certificado? Es algo a lo que dediqué atención en mi conferencia en el I Congreso Joyas Sostenibles, titulada «Impacto del consumo responsable la comercialización de joyas» y en lo que resulta crucial continuar profundizando (por ejemplo, «How traceability of gold became a focus for independent jewellers»).

¿Qué piensas tú?

No quiero pecar de agorero. Todo lo contrario, conozco esta industria y sé que existe capacidad y voluntad para cambiar las cosas, para mejorar, para crecer. No obstante, creo también que es necesario un ejercicio de «examen de conciencia» sereno y riguroso… y no sólo sobre el oro, sino sobre todas las materias primas propias de nuestra actividad. Si hablamos del diamante de extracción, por ejemplo, hay también muchas preguntas por responder («¿Funciona el Proceso de Kimberley? Reflexiones de Brad Brooks-Rubin»); y el diamante sintético, por su parte, tiene las suyas.

Si este artículo genera cierto debate, habrá cumplido su misión. Creo que se trata de un debate muy necesario y que desde la industria de la joyería tenemos mucho por hacer para adaptarnos a las preferencias de unos consumidores cada vez más preocupados, al menos en teoría, por la Responsabilidad Social Empresarial; es decir, por el comportamiento ético de las corporaciones.

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